Con ayuda, podrás identificar y explorar posibles condicionantes, teniendo la opción de sanar aquellas partes afectadas que impactan en tu estado de ánimo y decisiones.
Abordar inquietudes no solo es un paso hacia la resolución de problemas, sino también una oportunidad para el crecimiento personal y la construcción de una vida más plena.
Entre los motivos de consulta más frecuentes entre la población adulta se encuentran:
- Los problemas de regulación emocional: agresividad, ansiedad, estrés o angustia, miedos e inseguridades personales, bajo estado de ánimo (bien sea por duelo o por depresión aguda o crónica)…
- Dificultades para relacionarnos con otras personas, necesitando mejorar nuestras habilidades para resolver los conflictos con los demás o llegar a acuerdos, habilidades de comunicación efectiva, y otras habilidades sociales y emocionales como la empatía, la asertividad, aprender a decir no y poner límites… etc.
- Dificultades adaptativas: en el entorno laboral, familiar, o en el ámbito de las relaciones personales o de pareja que requieren un abordaje individualizado.
- Otras: baja autoestima, mala relación con la comida o con el propio cuerpo.
Muchas veces a la base de estas razones por las cuales las personas buscamos ayuda hay un trasfondo más profundo que viene de etapas anteriores de la vida, y que no han sido convenientemente resueltas, o que no han tenido la posibilidad de ser abordadas por la razón que sea.
Dentro de tu proceso de terapia irás tomando conciencia de cuáles son estos condicionantes si los hubiera y de poder profundizar en ellos, si así lo estimas conveniente, pudiendo sanar estas partes dañadas que de vez en cuando se “activan” influyendo en tu estado de ánimo y en tus decisiones, a través de este abordaje más profundo podrás tener una vida plena y satisfactoria en un futuro, recuperando el protagonismo y la capacidad de agencia sobre tu propia vida.
En 3G Psicología, estamos comprometidos a guiarte y en brindarte las herramientas necesarias para un futuro emocionalmente saludable.
